Desde la Plaza Mayor te puedes ir caminando al Barrio Chino por las avenidas Jiron Huallaga o Jiron Ucayali ( avenida peatonal), esta ultima la recomiendo ya que no hay carros y encuentras infinidad de comercios de venta de ropa, articulos y restaurantes.
Son 6 cuadras en linea recta hasta el Barrio Chino, el cual surgio de la inmensa migracion de chinos que llegaron a Peru desde las regiones de Canton y Sichuan mayoritariamente. Cuando arribas al barrio lo primero que notas es el arco color rojo caracteristico de de la cultura china.
La primera sensacion que tengo es de estar en Shanghai o en alguna ciudad de China, hay cientos de pequeños «chifas» que es como se le denomina en Peru a los restaurantes de comida china.
Mientras camino veo que muchos de los restaurantes tienen su expendio para llevar o para comprar algo ligerito y llevartelo comiendo como wontones fritos, dumplings hervidos o brochetas en palillos de bambu a precios «mini» y que se ajustan a los precios de los viajeros low cost.
Queria comer en un restaurante pero la mayoria tenian largas colas de personas formadas para entrar, asi es que use mi logica: «el restaurante mas pequeño con la cola mas larga de comensales es el que debe estar mas rico».
Restaurant Ton Kin Sen
Despues de casi una hora de cola y ser visto como «raro» al pedir una mesa para una sola persona pude hacerme con una mesa en el segundo piso del restaurant con una bonita vista del barrio.
Me pedi el menu ejecutivo por 15.90 Soles ( 4.5 USD dolares u 80 pesos Mexicanos), el menu incluia un entrante + segundo plato + complemento + postre y un vaso de soda o te que podias escoger de entre varias opciones del menu. Un super precio!! Tambien habia otros platillos a la carta pero eran porciones mas grandes
Me pedi la sopa de wantan , pollo saltado con verduras, arroz chaufa, un vaso de Inka Cola y de postre 2 naranjitas chinas caramelizadas.
La sopa de wantan era gigantesca para una persona, estaba celestial, nunca habia probado ninguna sopa china tan buena ni en Shanghai ni en California ni en Mexicali (Capital de la comunidad China en Mexico), la pura sopa valio la pena de la larga espera para entrar y comprendi por que habia esa cola de gente. A los minutos me trajeron un vaso de la famosa Inka Kola, tenia muchas ganas de probarla por que todo mundo en su mayoria toma Inka Kola en Peru. Para empezar el color es amarillo como orin, y tiene un sabor como a goma de mascar muy dulzona, en si la soda me parecio con un sabor rico quizas un poco dulce pero agradable.
Despues de acabar con la sopa, arribaron el pollo «saltado» con vegetales y esparragos acompañado del arroz chifa o chaufa. Cabe destacar que el pollo estaba bueno y con un sabor muy natural para nada grasoso como se acostumbra en Mexico. El arroz chifa estaba muy rico, tenia huevo e igual para nada grasoso.
No podia con tanta comida, debore el arroz y me comi la mitad del plato de pollo por que sentia que iba a vomitar de tanto comer, pero es que no podia dejar la comida, era simplemente delicosa!
Al final aparecio el mesero y me dice que si queria te y poste, solo le pedi la naranjitas chinas que trajo rapidamente. Estaban confitadass en almibar y resultaron beneficiosas para cortar el indigestion!
Si tuviera que darle una calificacion del 0 al 10 a la comida, le pondria un 11, la comida China o chifa en Peru es una experiencia que hay que vivirla indiscutiblemente y llevar mucha hambre ya que las porciones son gitantescas.